deberia ya de haberme acostumbrado a esperar lo inesperable,
deberia ya esperado lo siempre inevitable,
deberia saber que no hay lugar seguro en ninguna parte.
Violento, y vuelvo a ver pasar esa escena una y otra vez,
viendo pasar antes mis ojos incautos la destrucción.
Violento y mil pedacitos vuelan con fuerza incrustandose,
tatuandose, haciendo heridas profundas,
cicatrices eternas....