domingo, 9 de enero de 2011

Tierno

Pequeña golosina para el alma,
una mirada reflejada en aquella fina capa

de agua salada terminando de secar,

sus manos tratando de peinar su cabello,

buscando la respuesta a esa mirada.


Una sonrisa derritiendo un iceberg,

en un segundo mil palabras dichas,

mil sueños navegando en la cabeza.


Me perdi en el tumulto y no pudiste encontrarme,

una sonrisa ya conocida me desperto,

mire atrás y todo se desvanecio.