Ella: Ponte en mi lugar, llevamos juntas muchos años ya, y siempre he cuidado de ti, nunca te deje caer presa de la desesperanza y la amargura, no la pasamos bien juntas.
Recuerda, recuerda todos esos años juntas desde aquella vez que te rompieron el corazón, yo nunca fuí celosa, siempre te permití que tuvieras aventuras y desaventuras, que jugaras al enamoramiento y te emocionaras como niña cada vez que conocías a alguien que captara tu atención, conociendo tu promesa de que no importaría con quien compartieras tus horas, tus días eran míos, incluso fui yo quién te permitió conocerle, fue por mi que empezó esto, no pensé que me cambiarías, pensé que teníamos algo especial.
No entiendo por que quieres dejarme, si soy yo la que te consuela todas las noches cuando despiertas llorando por que soñaste estabas en sus brazos, ¿Quién si no yo te va a permitir sobrevivir todo este tiempo, toda esta distancia entre ustedes?
¿Que vas a hacer si también te rompe el corazón, que vas a hacer entre tanto pueden cruzar fronteras e intentarlo de verás?
¿Pretendes dejarme por que tienes miedo a la posibilidad de que nunca puedas estar en realidad sin mi?
No hagas esto, recuerda como me amabas, como yo era tu todo, como era con la única que podías acudir cuando el cielo se pintaba de gris.
Me necesitas, lo has hecho y tu lo sabes.
Yo: Nunca pensé que podría llegar a sentir lo que siento por alguien, también pensaba que estaríamos juntas por siempre. Pensé que tu y yo eramos el único complemento coexistible en mi mundo, me equivoque....
Quiero intentarlo, quiero intentarlo aunque tenga que unir tierras, aunque se que estoy arriesgando el todo por el todo, quiero intentarlo y quiero que funcione, a ti te amo y siempre te amaré, por ser la única que pudo comprenderme por tantos años, por que contigo disfrute todo aunque a la gente le parezca raro. Pero entiéndeme tú, tú que me conoces mejor que nadie, entiende que lo necesito intentar.
Ella: ¿De verdad piensas que esto es un adios?
Yo: No lo sé, solo espero que si nos volvemos a encontrar en el camino seas tan maravillosa como lo fuiste todos estos años, no me reproches nada y me recibas como mi amiga y mi amante eterna.
Ella: ¿No te das cuenta que nunca sabrás si me estas volviendo a ver o siempre fui tu reflejo? Amantes eternas..... si, ese es nuestro nombre.
Yo: Ay Soledad..... mi soledad..... mi eterna soledad.
